Nicolas Ghesquiere presentó la colección Crucero 2025 de la casa de alta moda parisina, Louis Vuitton, ante un público de lujo, entre los que se encontraban Ana de Armas, Ester Expósito, Jennifer Connelly y Saoirse Ronan, quien es embajadora de la marca.
Louis Vuitton dio a conocer sus últimos diseños de moda en el Park Güell de Barcelona, complementando a la perfección la obra maestra arquitectónica de Antoni Gaudí con nuevos y espectaculares estilos.
El sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO se transformó en un escenario para prendas vanguardistas que armonizaban con sus tonos terrosos y etéreos. Las modelos serpentearon entre las 86 columnas dóricas que sostienen una plaza abovedada en el centro del parque que domina Barcelona y el mar Mediterráneo a lo lejos.
Según las notas del desfile, Ghesquiere se inspiró en el «legado en constante mutación» de Gaudí y en el rico patrimonio artístico español.
Las siluetas dramáticas contrastaban con las suaves curvas de las estructuras orgánicas de Gaudí, que luego se reflejaban en los vestidos que se drapeaban y plegaban en volúmenes que desafiaban la gravedad.
Incidentes en el desfile de Louis Vuitton
Según reportó la agencia Efe, un grupo de unos cientos de residentes protestó contra el evento por lo que, según ellos, eran las molestias que había causado, incluida la reducción del espacio para estacionar en la zona. En la protesta también participaron activistas de los derechos de los animales.
Al grupo de manifestantes, situado unas calles más abajo del muro exterior del parque, se le oía tocar tambores, hacer sonar bocinas y lanzar petardos antes del inicio del espectáculo.
La Policía informó de que detuvo a una persona por resistirse violentamente a su decisión de retirar a los manifestantes de una calle para permitir el paso del tráfico.