Locher’s: perversión con un toque de clase

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“Perversión con un toque de clase” así define su creadora a la nueva firma de diseño de París, Locher’s. Prendas que a primera vista podrían provenir de cualquier mercado de pulgas de Londres, con bordados que asemejan a aquellos que las abuelas hacían a mano… pero las primeras impresiones engañan.

Si Locher’s fuera una persona sería quizás una mujer jóven de los años ’50 o ’60 de París o Londres, destinada a ser toda una dama, una mujer de familia, que lleva una diablita escondida por dentro, o quizás no tan por dentro. Aquella joven que teje, come masitas dulces por la tarde con las amigas, que podría parecer como una del montón pero está decidida a destacarse entre la multitud. Es aquella que, como todas las mujeres, quiere ser notada, pero se diferencia en que no tiene miedo de demostrarlo, sin por eso perder la feminidad y el poder que ésta le otorga. 

Delicadeza pura y sensualidad al 100%, romanticismo y rebeldía, vintage y modernidad, todo a la vez, no sólo no son opuestos en Locher’s sino que además son conceptos que se llevan bien. Su creadora Nicole Locher afirma haber creado la firma para satisfacer las necesidades de aquella mujer que quiere ser sutilmente reconocida por alguien que se acerque lo suficiente para leer la letra chica.

De letra chica se trata precisamente: a primera vista la propuesta de Locher se compone solo de remeras 100% algodón en tonos pasteles con bordados vintage de flores de colores. Pero una mirada más asertiva que se pose sobre la leyenda bordada en las remeras quedará sorprendida con las declaraciones que pueden ser leídas: “I don’t play Nice” (No juego limpio) o “Dirty little lovemaker” (sucio y pequeño amante) son dos de ellas, las más inocentes quizás.

Efectivamente, las prendas de Locher’s cumplen su propósito de enviar una pista sutil al otro para decirle que hay en el interior algo especial que vale la pena ser descubierto.

La colección de remeras se complementa con una línea de colgantes con camafeos de bebés enojados, dijes de flores de porcelana, cadenas de plata y moños de satén. Aquí nuevamente la leyenda lo dice todo.

No se pierdan de conocer esta propuesta tan sutil y a la vez tan fuera de lugar.

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Locher’s