Si bien la familia de la moda de la cual todos hablaron en 2022 fueron los Gucci, los franceses no quieren quedarse atrás y quien fue alguna vez el hombre más rico del mundo, Bernard Arnault, ya está pidiendo pista pese a que recién arrancó el 2023.
El titular de la multinacional LVMH, dueña de la marca Dior, entre otras, nombró a su hija Delphine Arnault al frente de la firma de alta costura y lujo. Dijo publicamente en un comunicado que el nombramiento es la “continuación de una carrera de excelencia en la moda y la marroquinería”.
La heredera de una de las fortunas más grandes del mundo fue desde 2013 directora general adjunta de Louis Vuitton, y antes había estado 12 años en Christian Dior. Bajo su dirección, Louis Vuitton fue capaz de “volar de récord en récord” y su “ojo agudo y experiencia incomparable serán activos decisivos en el desarrollo continuo de Christian Dior”, dijo Bernard Arnault en un comunicado.
Vale la pena recordar que tan solo en diciembre de 2022 Antoine Arnault, el segundo hijo mayor del patriarca del holding, también fue nombrado director ejecutivo de Christian Dior SE.
Son tiempos de cambio en Dior. Delphine llega para suceder a Pietro Beccari, quien sustituirá a Michael Burke al frente de Louis Vuitton, otra de las naves insignia del clan Arnault en LVMH.
“Nadie duda de que conducirá a Louis Vuitton hacia una deseabilidad y un éxito aún mayores”, declaró el CEO de la compañía. Burke fue reconocido también por elevar la distancia entre Louis Vuitton y sus competidores en el mercado de lujo, durante sus 10 años de gestión de marca.
Los cambios en la dirección se harán efectivos el 1 de febrero.