La marca vinculada al surf, Quiksilver, saldría de la bancarrota en la que entró solo en Estados Unidos en septiembre pasado.
Anunció que su plan de reorganización fue aprobado en enero por la correspondiente corte norteamericana, de manera que espera emerger con un balance en limpio en la semana del 8 de febrero, tras un acuerdo con la compañía Oaktree Capital Management.
Oaktree y otros tenedores de bonos garantizados perdonarán u$s279 millones de deuda a cambio del control del expedidor. Oaktree posee alrededor del 75% de esa deuda y recibirá una participación mayoritaria en la empresa reestructurada.
Vale la pena aclarar que la marca –que detenta también las etiquetas hermanas Roxy y DC– funciona bien en el resto de los mercados, como en la Argentina.
“Es un hito importante en la evolución de Quiksilver”, dijo al respecto Pierre Agnes, Chief Executive Officer (CEO) de la empresa. “Es un testamento de nuestra fuerte visión, liderazgo y resilencia, así como de nuestros apasionados empleados y nuestros leales clientes”, cerró.
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